En la secundaria, los estudiantes se encuentran en una etapa en la que la motivación y la competencia son motores clave para su participación. La educación física es un espacio idóneo para canalizar esa energía hacia aprendizajes significativos, y la locomoción es un contenido fundamental porque constituye la base de la mayoría de los deportes y actividades físicas.

La gamificación permite transformar la clase en una experiencia lúdica y competitiva, mientras que la tecnología de códigos QR añade dinamismo e innovación al proponer retos aleatorios y atractivos. Con ello, se busca que los adolescentes no solo desarrollen sus habilidades locomotoras, sino también valores como la cooperación, la resiliencia y la autorregulación.